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Así va la inflación en América Latina.
El país tiene 5,05% de inflación anualizada; las economías con el indicador más alto en la región son Venezuela, Argentina y Bolivia
La inflación en América Latina es una de las grandes preocupaciones de los gobiernos. Para el caso de Colombia, el dato se ha mantenido estable a lo largo del año y en el último informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, llegó a una cifra anualizada de 5,05% para mayo. El país tiene la quinta inflación más alta de la región. Venezuela, Argentina, Bolivia y Brasil son las economías con el indicador más alto, con corte a mayo.
El país reportó en el quinto mes del año un IPC mensual de 0,32% y una cifra acumulada desde enero de 3,63%. El dato anual, de hecho, es su nivel más alto en los últimos 43 meses. Se explicó por una moderación del sector de servicios. El Banco de la República tiene ahora la puerta abierta para rebajar las tasas.
En la región, Venezuela se mantiene con el IPC anual más alto, con 229%. Su dato mensual y año corrido alcanzó 26% y 105,5%, respectivamente. El Observatorio Venezolano de Finanzas, OVF, aseguró que la ascensión de la tasa de inflación a 12 meses guarda una relación con la monetización del déficit fiscal a causa del financiamiento del Banco Central de Venezuela a Pdvsa, que se incrementó 300%.
Para el caso de Argentina, si bien cuenta con la segunda inflación anualizada más alta (43,5%), el dato mensual de 1,5% fue el más bajo en cinco años. “Sin cepo, corrigiendo precios relativos y con la economía creciendo a 6% anual. Tenemos el mejor presidente del mundo”, destacó el ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo.
Por su parte, el presidente Javier Milei publicó un mensaje en redes en el que aseguró que “la inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno monetario generado por un exceso de oferta de dinero. Ya sea porque sube la oferta, cae la demanda o las dos cosas a la vez, lo cual hace que pierda poder adquisitivo el dinero y que los precios en dinero suban”.
Bolivia y Brasil siguen en el listado con un IPC de 18,5% y 5,2%, respectivamente. La inflación en el país brasilero se desaceleró más de lo esperado durante el quinto mes del año, pero el indicador anual se mantuvo en el objetivo del Banco Central. La mayor economía de América Latina fijará sus tasas el próximo 17 y 18 de junio y los responsables de la política monetaria prometieron una “flexibilidad y cautela”.
Moody’s, por otro lado, aseguró que ve una “difícil recuperación” de la nación gobernada por Luiz Inacio Lula da Silva. Los datos macroeconómicos no han sido suficientes para mejorar la credibilidad ante los inversionistas extranjeros.
La calificación crediticia se rebajó a estable el mes pasado por una presión de presupuesto derivada de las altas tasas de interés. Samar Maziad, analista de Moody’s para la región, aseguró sobre Brasil que “los esfuerzos realizados por el Gobierno no fueron suficientes para fortalecer la credibilidad, reducir los costos de los préstamos o encauzar la trayectoria de la deuda por un camino diferente”.
Luego sigue Colombia y los expertos aseguran que el Banco de la República ha mantenido una buena política monetaria. Carlos Sepúlveda, economista de la Universidad del Rosario, aseguró que hay “un manejo juicioso e institucional sobre el objetivo misional, que es el control de la inflación”. El experto agregó que el Emisor ha actuado con responsabilidad, aunque aún hay un camino por recorrer para llegar a la meta de IPC a largo plazo.
“No hemos reducido la inflación a la velocidad que quisiéramos, a pesar de la política del Banco. Creo también que el Gobierno Nacional no ha puesto su aporte para complementar esas políticas”, aseguró.
El economista dijo que hay una coyuntura económica en la que hay discusiones sobre desequilibrios macroeconómicos, la incertidumbre y la inversión. El país tiene preocupación sobre un crecimiento sano de la economía y esto impacta en sus variables fundamentales como lo es la inflación, que incide en el consumo y el PIB.
Por otro lado, Uruguay, México y Chile son los siguientes países en el listado, con números relativos al IPC anual de 5,05%, 4,42% y 4,4%, respectivamente. El listado lo completan República Dominicana (3,8%); Paraguay (3,6%); Guyana (2,9%); Guatemala (1,7%), Perú (1,69%); y Ecuador (0,5%).
Carolina Jaramillo, portavoz del Gobierno de Ecuador, aseguró que el país aún registra una inflación relativamente baja comparada con las naciones vecinas en la región, y los indicadores de este año.
Sepúlveda aseguró que un IPC bajo, en teoría, es la respuesta de una economía sana, entre la cifra más esté cercana a cero. “Pero no podemos juzgar por una cifra aislada y catalogarla como buena o mala de tajo y cada economía en la región tiene su propia complejidad”, dijo.
En América Latina hay tres países que tienen cifras negativas en materia de inflación. Panamá es la nación que tiene el dato anualizado con más caída negativa, pues alcanza -0,7%, seguido de El Salvador con -0,2% y Costa Rica con -0,12%.
La deflación es definida por el Banco de Santander como inflación negativa, una caída generalizada de los precios de los bienes y servicios. Se estima que se da por un exceso de la oferta y una reducción de la demanda. Esta asociada a crisis y recesiones económicas.
“En el caso de la deflación, es un fenómeno reflejo de una caída general de los precios de una economía y no se trata de un buen signo. Trae efectos negativos, pues implica una reducción del gasto y la inversión”, aseguró el economista.
A pesar del fenómeno deflacionario, el Gobierno de Panamá asegura que el país aún se destaca como una de las economías con más dinamismo de América Latina. El Estado afirma que tiene una fortaleza y buen ritmo para “mantener un crecimiento sostenible”, incluso en medio del panorama político retador luego de la llegada de Donald Trump.
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